Los libros leídos en 2020, o: de cómo el resto de miembros de Licencia Histórica me generan necesidades.

 Hola a todos:

Empiezo con una recomendación, tengan cuidado con los amigos que tienen o acabarán como yo. Siempre, como no podía ser de otra manera dado mi oficio, he leído mucho. Nunca me había preocupado si leía quince, veinte o treinta libros al año y tampoco nunca he planificado un orden de mis lecturas. Hasta hoy...

Se me han confabulado casi todos los miembros de Licencia Histórica para que esto cambie, para crearme necesidades que antes no tenía. Y lo más gracioso de todo es que ha sido sin conexión entre ellos. Hace unos días le dije a Juan que estaba creándome un bullet journal. En principio pretende ser algo muy rudimentario sin lettering ni diseños super creativos. Vamos, que comenzó siendo un listado de tareas con colores y poco más. 

Estoy intentando,decía, hacerme un humilde bullet journal. Humilde y muy básico pues es el primero y quiero ir haciéndolo según mis necesidades y ver si me funciona o no. Me manda Juan algunas fotos del suyo y flipo. Creo que el Desembarco de Normandía precisó de menos organización de lo que este chico lleva para su día a día. Y en ella una lista de lecturas... Sofía se une al coro y me manda imágenes el suyo. No sabía yo que esto del bullet journal estaba tan extendido. Ambos ejemplos son espectaculares y diametralmente distintos.

Captura de un momento de lectura nocturna de un servidor. Fuente: La biblioteca de los locos

Una de las secciones que más me han llamado la atención de ambos es la "lista de libros leídos en 2020".  Y llega la tercera en discordia que es Iris, también creo que le da a esto del bullet journal, y lanza en sus redes que tiene el listado de lo que ha leído en 2020 y la compartía. Os odio, desde el cariño, a los tres porque ahora tengo que hacer lo mismo. Insomne que estoy y no pararé hasta saber qué demonios he leído yo en 2020. He podido reconstruir mi año lector a través de mi Instagram La biblioteca de los locos sin incluir las lecturas relacionadas con investigación y docencia. De hecho podría decir fecha de compra de los mismos porque lo apunto a lápiz en alguna esquinita del libro pero no aporta mucho y no me voy a poner a buscar uno a uno los ejemplares.

Espero abultar tu lista de libros pendientes y si es a alguno de los anteriormente citados mejor que mejor. Otro día confeccionaré una lista de libros que tengo en casa aún por leer y que no me produce ansiedad alguna, no como a otros que tienen extraños remordimientos por ello. Por ahora vamos con lo que he leído en 2020.

Captura de La biblioteca de los Locos de la obra El demonio del Sur

  • Oriente Express. El tren de Europa de Mauricio Wiesenthal . Interesado por la vida cultural del siglo XIX compré este libro que realmente esconde una historia sentimental y cultural del viejo continente entre los siglos XIX y XX, una maravilla. Leído en verano.
  • El domingo de Bouvines de George Duby. Otro clásico básico que (re)leí en el Gran Confinamiento. Imprescindible si te gusta la Historia Medieval y la Historia en general. En la línea de Le Goff con una prosa y erudición arrebatadora. Alucino que esté descatalogado. 
  • 21 lecciones para el siglo XXI del historiador Yuval Noah Harari. Libro que hace prospectiva de los retos a los que nos veremos, en opinión del autor, obligados a dar respuesta en el Siglo XXI. Interesante y polémico. Recuerdo que lo compré en un supermercado en fase...fase...cualquiera se acuerda. Estaba con "mono" de nuevos libros y de lo poco que había pude hacerme con este.
  • La crisis del siglo XVII. Religión, Reforma y cambio social de Hugh Trevor-Roper. Sinceramente me acerqué por un extenso capítulo que se dedica en el mismo a la brujería pero me he encontrado con perspectivas de lo más seductoras en torno a la economía del siglo XVII. Aún siendo un clásico no recuerdo que nadie me hablara de él en la carrera. 
  • La era del vacío de Gilles Lipovetsky. Sociología y filosofía en vena para intentar entender, si eso es posible, un poco el mundo que me ha tocado vivir. De lo más sugerente. 
  • Halloween. La muerte sale de fiesta de David J. Skal. Historia cultural de una fiesta que en los últimos años se ha introducido con fuerza en España. Por encima de filias y fobias me quería introducir en la historia de esta fiesta y su evolución a lo largo de la historia. Me encanta todo lo que escribe este autor. También saqué notas que luego me han ayudado para buscar pistas académicas.
  • El espectáculo de la ilusión. La magia, lo paranormal y la complicidad de la mente de M.L. Tompkins. Evidentemente en la elección de este título influyó mi gusto por el XIX y toda la corriente paranormal que le recorrió y en entender cómo la mente se engaña para creer en tales cosas. Si me dedico a temas como el de la brujería ya tenemos el pack completo. Bellamente ilustrado y que me ha dado una perspectiva más completa sobre tan, para mí, divertido momento de la historia.
  • El demonio del Sur. La leyenda negra de Felipe II del historiador Ricardo García Cárcel. Tras oír estupidez tras estupidez sobre la Leyenda Negra y "lo que nos odian fuera" fue reconfortante volver a un trabajo académico serio para tener una perspectiva sobre la tan traída y llevada Leyenda y una oportunidad de volver a uno de los reyes que más me interesan de la Historia de España.
  • El mono ansioso. Biografía de la angustia, la melancolía, el hastío y la depresión de Xavier Roca-Ferrer. Premonitorio de lo que se nos venía encima pues lo tengo fechado en mi Instagram a 6 de febrero de 2020. Evidentemente no tengo poderes ni imaginaba la que nos esperaba. Mi interés en este título es por las conexiones que tiene el fenómeno de la brujería con las enfermedades mentales. Vuelve a ser un libro que analiza el surgimiento del estudio científico de tales enfermedades en el siglo XIX y entronca con la obra de Drácula a través del personaje de Renfield.
Tampoco descuido la estética de mi mimada biblioteca.
  • Microhistoria. Las narraciones de Carlo Ginzburg de los historiadores Justo Serna y Anaclet Pons. Otro de los que leí en el Gran Confinamiento Si has seguido este blog de manera más o menos continuada no te pillará de sorpresa mi admiración por Carlo Ginzburg y los citados historiadores son los mayores expertos en España sobre el mismo. Aproveché que Justo Serna está en Instagram para preguntar sobre una posible reedición en condiciones sobre mi gran clásico básico por excelencia, Historia Nocturna y la verdad es que se ve poco probable. Y luego se publican otros que tela...
  • Las violetas del Círculo Sherlock, eficaz novela de Mariano F. Urresti que me hizo el confinamiento más llevadero. Ficción que mezcla a mi adorado Sherlock con otra de mis obsesiones, Jack el Destripador, nada podía salir mal. Digo con vergüenza que creo que es las poquísimas novelas que me he leído este año.
  • La conjura de los necios de John Keenedy Toole. Clásico básico personal literario. Es relectura en este caso, de las pocas novelas que releo de vez en cuando. Si no conoces a Ignatius no tienes perdón de Dios. Todos somos, y más los historiadores, un poco Ignatius y lo sabes. Otro leído en el "Gran Confitamiento" como dice un amigo mío.
  • Este año ha sacado lo mejor de algunos y lo enormemente malo de otros. No sé por qué siempre nos hacen daño los idiotas y enturbia lo mucho y bueno que vemos. Hay una frase de Yeats que creo que define muy bien este momento histórico "... A los mejores les falta convicción, mientras que los peores/ están henchidos de intensidad pasional" . Para alejarme del ruido, el miedo y la furia busqué consuelo en la relectura de las Meditaciones de Marco Aurelio y, como era de esperar, no defraudó. Hay una cita que tengo en la cabeza desde entonces y que intento poner en práctica: 
Al despuntar la aurora, hazte estas consideraciones previas: me encontraré con un indiscreto, un ingrato, un insolente, un mentiroso, un envidioso, un insociable. Todo esto les acontece por ignorancia de los bienes y de los males. (...) ni puedo enfadarme con mi pariente ni odiarle.  Pues hemos nacido para colaborar, al igual que los pies, las manos, los párpados (...).

Y hasta aquí mi lista, ya puedo descansar. No sé si terminaré por hacerme al bullet journal pero me han quedado varias cosas claras. Que haré este listado desde aquí hasta la eternidad de lo que he leído y que me niego tanto a la lista de futuras lecturas como a la de películas y series por ver. Planificar hasta eso me mata pues mis lecturas y películas están seleccionadas a base de intuición y oportunidad. No siempre acierto pero en el riesgo está parte de la diversión. 

No olvides comentarnos tu año lector y tu experiencia con las listas. De esta manera me generarás la imperiosa y obligatoria necesidad de hacerme con ése libro que me recomiendas. ¡Que no pare la diversión!

Saludos a todos y feliz y lector 2021. 

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